¿Qué es el yoga?
Los orígenes del Yoga son prearios, ya que hay alusiones (no concluyentes) a esta disciplina en los hallazgos arqueológicos de la civilización del valle del Indo, por lo que algunas fuentes arqueológicas consideran que tiene mas de cinco mil años de antigüedad. En cambio, hay quienes sostienen que el yoga es eterno (anādi: "sin comienzo") y siempre existió.
En su origen la palabra "yoga" se usó en la India desde la época védica, en el sentido propio de control de la mente y los sentidos.
Atendiendo a su etimología, "Yoga" deriva de la raíz sánscrita "Yug" que significa unir, dirigir y concentrar la atención en el aquí y ahora.
El yoga, que primeramente fue practicado por el hinduismo y después se extendió a el jainismo y el budismo, es una sabiduría práctica, un método de autodisciplina basado en la experiencia subjetiva, que forma parte de los seis sistemas ortodoxos del pensamiento indio.
Los seguidores del hinduismo distinguen entre el alma (impasible y sin emociones) y la mente (fluctuante y llena de ansiedades). Con el yoga se pretende el desarrollo de la persona llevando una vida plena, y para ello es preciso satisfacer tres necesidades: la necesidad física (salud y actividad), psicológica (conocimiento y poder), y espiritual (felicidad y paz). Cuando los tres estados se dan, entonces estamos listos para la comunión; la unión (samādhi) en perfecto equilibrio de nuestros componentes (cuerpo, mente y espíritu) con la del dios creador Brahma, haciéndonos capaces, a través de la práctica constante, de mirar la vida con ecuanimidad en todos sus aspectos para asegurar la liberación (mokṣa) de nuestra alma de las ataduras de la materia.
Fue codificado, coordinado y sintetizado a un sistema asequible para todos por Patanjàli en su obra "Yoga sutra" (probablemente del siglo III a.C.) compuesto por 196 aforismos que representan el arte y la ciencia del yoga, donde prescribe la adhesión a ocho preceptos que constituyen lo que se denomina ashta-anga yoga, el ‘yoga de los ocho miembros’ (siendo ashta: "ocho", y anga: "miembro").
A pesar de que el yoga, tal y como lo conocemos hoy en día, ha sufrido muchas transformaciones, en la mayoría de los casos su esencia permanece intacta.
Si buscamos los textos que establecen las bases del yoga podemos citar estos cinco; Bhagavad-guita, los Yoga-sutras (de Patanjàli), el Gheranda-samjita, el Yoga-darshana-upanishad y el Haṭha-yoga-pradīpikā.
Beneficios físicos del yoga
La constancia en la práctica del yoga puede cambiarnos la vida a mejor, tanto física como mental y emocionalmente. No es necesario practicar una hora diaria; con que lo hagamos quince minutos ya notaremos sus beneficios, que nos servirán de estímulo para avanzar en nuestra practica.
Entre los beneficios físicos que podemos conseguir están:
Mejora la respiración; a través de la respiración natural completa incrementamos la oxigenación de las células y mejorando la circulación sanguínea, incidiendo positivamente en todo nuestro organismo equilibrando el sistema nervioso, mejorando la actividad aeróbica del sistema cardiaco y relajando la musculatura.
Reducción del estrés; con la práctica del yoga se pueden reducir los efectos físicos y mentales del estrés de manera casi inmediata reduciendo el nivel de cortisol (la hormona del estrés), reforzando así nuestro sistema inmune.
La combinación de la acción y la relajación en la práctica de yoga es primordial para vivir la experiencia de la eliminación del estrés; aprender a relajarse en la acción, incluso en la acción intensa, es la semilla que crea los recursos personales para responder al ritmo frenético de la vida con serenidad.
Aumenta la flexibilidad y movilidad; desde las primeras prácticas. En un principio nuestro cuerpo estará rígido, lo que se percibe con más claridad en las torsiones, pero, con la constancia, estas posturas son las mejores aliadas para aumentar la flexibilidad y rango de movimiento articular. También es importante aumentar poco a poco el tiempo en el que se mantienen las posturas.
Mejora el equilibrio; ejercitando la conciencia sobre el cuerpo para mantener una buena alineación. Cuando se practica yoga, es importante mantener la concentración en las sensaciones que produce cada postura, estando presentes en todo momento, y realizando las correcciones necesarias. Con la experiencia el cuerpo aprenderá a realizar pequeños ajustes para recuperar el equilibrio en una postura.
Fortalece músculos y huesos; evitando lesiones y previniendo dolencias como la artritis. Mejora la coordinación y se reducen las caídas en las personas mayores. Con el yoga se incide en la salud de la columna vertebral se consigue mejorar la postura.
Senderos del yoga clásico
El yoga se ramifica en CUATRO vertientes principales:
Bhakti (devoción): se centra en el camino de la devoción y el amor. El practicante de Bhakti aspira a la unión con lo divino por medio de una imagen conocida (como la de una deidad) a la que se ofrece oración y adoración.
Jnana (conocimiento): su origen está en la razón y el pensamiento. Es el camino del autoconocimiento filosófico a través del acercamiento intelectual a la evolución espiritual mediante el constante autoanálisis. Se dice que es la vía mas difícil porque se requiere de un agudo intelecto despejado de emociones.
Karma (acción): la acción desinteresada se convierte en una ofrenda a Dios, para ir para ir más allá de la competitividad y las expectativas mundanas destruyendo el egoismo.
Raja (real): basado en los Yoga Sutra recopilados por el sabio Patanjali. Es la ciencia de la autorrealización a través del control de la mente y el acercamiento científico.
De estas cuatro líneas generales derivan a su vez otras modalidades que podríamos denominar escuelas, cada una con sus propias características y peculiaridades. En realidad hay mas escuelas de yoga que bolas en un bombo de lotería. Si tuviera que hacer referencia a todas me quedaría sin memoria en el ordenador, así que pongo solo algunos ejemplos:
Ashtanga: es el yoga de los ocho pasos (Yama, Niyama, Asana, Pranayama, Pratyahara, Dharana, Dhyana y Samadhi).
Dhyana (yoga de la meditación): busca la iluminación, trascender el dolor y el sufrimiento a través del control de la mente y la meditación.
Hatha (yoga físico): uno de los más populares, basado en cinco principios, que son; la práctica de asanas (posturas), pranayama (respiración), dieta equilibrada, pensamiento positivo, relajación y meditación. Todo ello para conseguir el dominio externo e interno del cuerpo.
La palabra Hatha está formada por dos voces sáncritas; HA (sol) y THA (luna). Por Sol se entiende el principio masculino; activo y positivo. Por LUNA se entiende el principio femenino; pasivo y negativo.
Kundalini (yoga del kundalini): es parte del Tantra (sistema de conocimiento que trasciende la conciencia ordinaria). Kundalini significa espiral y se refiere a la energía situada en la base de la columna vertebral, en el primer chakra. La práctica del Kundalini yoga permite que dicha energía ascienda a lo largo de la columna vertebral, activando todos los chakras.
Laya (yoga del control espiritual): busca el control del espíritu a través de la voluntad, escogiendo el momento y la manera de morir.
Mantra (yoga del mantra): su propósito es convertir sonidos y vibraciones conflictivos en armonía para crear sinergia, activar los chakras y experimentar el silencio.
Nada (yoga del sonido): busca revelar el sonido propio, la nota sonora que nos caracteriza y aprovechar su energía colocando dicha nota en la voz.
Nidra (yoga psíquico o sueño consciente): es una antigua práctica tántrica, actualizada y adaptada a tiempos modernos quitándole las complicaciones ritualistas, que de forma sistemática busca la relajación física, emocional y mental.
Purna (yoga aintegral): creado por Sri Aurobindo en el siglo XX, es una síntesis de Karma, Bhakti y Jnana Yoga que integra Vedanta, Tantra y otros tipos de espiritualidad.
Shida (yoga del canto y la devoción): basado en la práctica del canto y la meditación para sublimar la esencia del ser interno.
Tantra (yoga de la energía sexual): trabaja con las energías psíquicas y fisiológicas que encierran nuestra sexualidad.
Yantra (yoga de los yantras): Se basa en el estudio y uso de los símbolos geométricos que representan la armonía y unión de todas las cosas.
Yin: trabaja los tejidos conectivos y las fascias.
Espero que la información os guste y sea útil.
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